Todo nuestro contenido está inspirado en los maestros que admiramos, aquellos que nos han guiado durante nuestros años de estudio y práctica colectiva. Siempre estaremos en deuda con ellos por compartir su sabiduría con nosotros y por personificar las enseñanzas en la forma en que viven y enseñan.
Agradecemos a nuestras familias y amigos de quienes la mayoría de nosotros estamos distantes en este momento, que nos aman y apoyan siempre, a ellos les debemos gratitud de por vida. Que nuestros papeles se inviertan, nosotros les cuidamos como ustedes nos cuidaron a nosotros, y les retribuyamos su bondad en cada momento y en cada vida.
Estamos muy agradecidos con Lama Zopa Rinpoche y el Monasterio Kopan, los monjes y monjas que han estado pidiendo por la felicidad y el bienestar de todos los seres mucho antes de que esta crisis del Coronavirus comenzara. Les agradecemos por su incansable esfuerzo, y por compartir consistentemente su sabiduría con nosotros. Nuestra mayor gratitud también se extiende al personal de la cocina, la recepción y la biblioteca, el café, los niños de la escuela, los perros del monasterio (Rocky y Ms. Julia), los monos, los pájaros, las mariposas que nos hicieron compañía, que vivan felices y libres de preocupaciones.
También les agradecemos a todos ustedes por su interés en este proyecto, su participación y sus donaciones. Que todo los logros y la alegría que deriven de vuestra práctica sea una positiva influencia para todos aquellos que conocéis y para cada parte de la tierra en la que camináis.
Dedicamos todo el potencial positivo de este proyecto a la extinción de todas las enfermedades, la eliminación de todo el miedo, y la fructificación de todas las cosas buenas en la vida de todos los seres.
